Semana 27 de marzo: COMO LA MONTAÑA

Montaña en lago

 

Como la montaña que constantemente visita mi ventana.

 

A veces, el sol la calcina. Otras, la ahoga.

 

Con frecuencia la lluvia la castiga.

 

No es raro que la niebla la envuelva mansamente.

 

Nunca la oí quejarse por culpa del calor o del frío.

 

Jamás exigió nada por su majestuosa belleza. Ni el agradecimiento. Se da simplemente. Gratuitamente.

 

No es menos majestuosa cuando el sol la acaricia que cuando el viento la azota. No se preocupa de que la vean. Ni se enfada si la pisan.

 

Es como Dios: todo lo soporta; todo lo sufre; todo lo acoge. Dios se comporta como ella. Por eso la montaña es un sacramento de Dios: revela, recuerda, alude, remite.

 

 

Leonardo Boff