SILENCIO Y SERVICIO

Domingo XVI del Tiempo Ordinario

17 julio 2022

Lc 10, 38-42

Entró Jesús en una aldea y una mujer llamada Marta lo recibió en su casa. Esta tenía una hermana llamada María, que sentada a los pies del Señor, escuchaba su palabra. Y Marta se multiplicaba para dar abasto con el servicio, hasta que se paró y dijo: “Señor, ¿no te importa que mi hermana me haya dejado sola con el servicio? Dile que me eche una mano”. Pero el Señor le contestó: “Marta, Marta: andas inquieta y nerviosa con tantas cosas: solo una es necesaria. María ha escogido la parte mejor, y no se la quitarán”.

SILENCIO Y SERVICIO

Inquietud, nerviosismo, estrés…, parecen ser rasgos típicos de nuestra sociedad. Con frecuencia, nos pueden la prisa y la ansiedad, como si anduviéramos huyendo de nosotros mismos.

El miedo al silencio suele ser expresión del miedo al propio mundo interior y, en un plano más profundo, miedo a la “muerte” del yo. Porque el silencio lo disuelve. La mente necesita estar siempre en modo activo y protagónico, por lo que lleva muy mal el silencio. A su vez, el hacer le da al ego sensación de consistencia, de fuerza y de eficacia. Todo ello explica que el ego se sienta a gusto en el hacer, al mismo tiempo que rehúye el silencio.

Sin embargo, la acción, desconectada del silencio, se transforma en inquietud que fácilmente termina en desasosiego. La acción adecuada es hija del silencio porque, al acallarse la mente y el yo, cesa también la apropiación y la acción fluye de manera gratuita.

Esa es “la mejor parte”: la conexión con aquello que somos en profundidad -y que se saborea en el silencio de la mente-, de donde brotará el servicio eficaz.

Porque la persona “realizada” no es “Marta” ni “María”: es “Marta” y “María”, a la vez. Silencio y servicio, cuando son genuinos, limpios y desapropiados, constituyen las dos caras de la misma moneda.

¿Cuido el silencio?

CANAL DE YOUTUBE Y CAMBIOS EN LA WEB

1. Canal de Youtube: Meditación y vida cotidiana

 En ese canal pueden encontrarse los contenidos que hemos ido ofreciendo a lo largo de los dos últimos cursos.

En concreto, en el mismo hay cuatro listas:

Nos ha parecido oportuno hacer una lista con solo las prácticas meditativas, para que sea fácil el acceso a aquella que a cada cual pueda interesarle en un momento concreto.

El último video de cada una de las tres primeras listas contiene un índice de temas y de prácticas, de manera que resulte fácil encontrar aquello que se busca.

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2. Cambios en la web: https://www.enriquemartinezlozano.com/

Son cambios introducidos con el fin de incluir en ella los contenidos de Youtube.

En concreto, los cambios introducidos se encuentran en la pestaña: MATERIALES-PRÁCTICAS.

Al hacer clic en ella, se abren tres nuevas:

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Al dar cuenta de ello, necesito expresar mi gratitud a quienes, con tanto mimo como gratuidad, han hecho posible el desarrollo de las sesiones en Youtube: Josu Erro, Txemi Pérez y Ecequiel Subiza. Así como a Gregorio Dávila, que lleva el cuidado de la web. A los cuatro, muchas gracias de corazón.

PROVOCACIÓN, SUBVERSIÓN, COMPASIÓN

Domingo XV del Tiempo Ordinario

10 julio 2022

Lc 10, 25-37

En aquel tiempo, se presentó un letrado y le preguntó a Jesús para ponerlo a prueba: “Maestro, ¿qué tengo que hacer para heredar la vida eterna?”. Él le dijo: “¿Qué está escrito en la Ley?, ¿qué lees en ella?”. El letrado contestó: “Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma y con todas tus fuerzas y con todo tu ser. Y al prójimo como a ti mismo”. Él le dijo: “Bien dicho. Haz esto y tendrás la vida”. Pero el letrado, queriendo aparecer como justo, preguntó a Jesús: “¿Y quién es mi prójimo?”. Jesús dijo: “Un hombre bajaba de Jerusalén a Jericó, cayó en manos de unos bandidos, que lo desnudaron, lo molieron a palos y se marcharon, dejándole medio muerto. Por casualidad un sacerdote bajaba por aquel camino y, al verlo, dio un rodeo y pasó de largo. Y lo mismo hizo un levita que llegó a aquel sitio: al verlo dio un rodeo y pasó de largo. Pero un samaritano que iba de viaje, llegó a donde estaba él y, al verlo, sintió compasión, se le acercó, le vendó las heridas, echándoles aceite y vino y, montándolo en su propia cabalgadura, lo llevó a una posada y lo cuidó. Al día siguiente sacó dos denarios y, dándoselos al posadero, le dijo: «Cuida de él y lo que gastes de más yo te lo pagaré a la vuelta». ¿Cuál de estos tres te parece que se portó como prójimo del que cayó en manos de los bandidos?”. El letrado contestó: “El que practicó la misericordia con él”. Le dijo Jesús: “Anda, haz tú lo mismo”.

PROVOCACIÓN, SUBVERSIÓN, COMPASIÓN

La conocida como “parábola del buen samaritano” constituye una joya universal y atemporal de humanidad, aunando en sí misma provocación, subversión y compasión.

Es un texto provocativo (literalmente, pro-vocar significa “llamar hacia adelante”) que busca desinstalar de creencias y seguridades rutinarias. Trasciende la formulación de la Ley y sus preguntas –“¿Qué tengo que hacer para heredar la vida eterna?”-, llevando al interlocutor del mundo de las creencias a la realidad de la persona necesitada.

Es un texto subversivo, que coloca como prototipo de bondad a alguien (“un samaritano”) que era considerado “hereje” y “pecador” -alguien a quien la religión despreciaba-, al tiempo que muestra al sacerdote y al levita -los hombres del Templo- como errados en su comportamiento legalista.

Es un texto que sitúa la compasión como criterio definitivo de verdad y de acierto. ¿Cómo hacer para acertar en la vida? Brindando ayuda a la persona en necesidad. En ese principio se centra toda la práctica propuesta por Jesús: “Haz tú lo mismo”.

¿Qué lugar ocupa la compasión en mi vida?

EUTANASIA: RELATO DE UN MÉDICO

UNA MAÑANA DE LUZ BLANCA:
RELATO DE UN MÉDICO TRAS SU PRIMERA EUTANASIA

Jesús Medina, un doctor de Leganés, en la Comunidad de Madrid, realizó la intervención el 15 de noviembre de 2021. Esa noche, al llegar a casa, escribió un texto sobre cómo se sintió y lo que vio.

En El País, 23 junio 2022. https://elpais.com/sociedad/2022-06-23/una-manana-de-luz-blanca-relato-de-un-medico-tras-su-primera-eutanasia.html

Jesús Medina, un médico que trabaja en Leganés, realizó su primera eutanasia el 15 de noviembre de 2021. Es una de las 172 que se han realizado hasta la fecha en España tras un año desde la entrada en vigor de la ley que lo permite. “No me falles”, le dijo la paciente, una señora de 86 años con un cáncer de colon terminal, cuando pidió morir dignamente. Pero en un principio no podía hacer nada: la Comunidad de Madrid todavía no había formado su comité de garantías. Cuando se formó, la petición fue rechazada, pero fue aceptada tras apelar la decisión, casi tres meses después de que la paciente decidiera que no quería aguantar más. Esa noche, al llegar a casa, Jesús escribió este texto:

Debo prepararme por dentro y por fuera esta mañana de jueves. He pasado una noche inquieta y me desperté temprano. En la ducha noté que mi cuerpo estaba temblando.

Rezo y comparto mis sentimientos con mis seres queridos.

Vuelvo a rezar un rato largo cuando ya no hay nadie en casa.

Salgo a la calle y sigo temblando. Estoy a punto de no coger el coche porque temo no poder conducir. Pero hago un salto de confianza: sé que puedo conducir.

Llegamos al portal. El cielo es de un azul tan claro que me parece un papel de regalo que envuelve la ciudad.

Ya estamos los tres: los dos enfermeros y yo. Dedicamos unos instantes para contarnos lo nerviosos que estamos, pero lo convencidos de estar realizando un acto médico, movidos por el amor y el respeto a la libertad individual.

En la casa hay un ambiente casi festivo (como cuando esperas a que salga la novia de la habitación el día de su boda).

Están los hijos y muchos nietos. El marido es el miembro más frágil de la familia.

Ella está espléndida. Vestida con un pijama blanco y una bata de flores.

Maquillada, perfumada, con un ramo de flores que le acaban de dar sus nietas.

Saludamos a todos de forma discreta pero emocionados.

Ella consuela a los que se acercan. Está preparada, fuerte, serena y contradictoriamente parece llena de vida.

Explicamos en voz alta los pasos que vamos a realizar: preparamos la medicación en la habitación, después pasa la paciente para colocarle dos accesos venosos y después pueden pasar los familiares que lo deseen.

En la habitación se organiza todo, escrupulosamente ordenado. Se deja todo preparado en un ambiente solemne pero amigable. Queremos que todo esté previsto y el procedimiento sea fluido.

En el salón ya se oyen besos, deseos entrecortados, agradecimientos, algún sollozo y unos últimos abrazos muy apretados.

Ella pasa a la habitación y se tumba en la cama con completa naturalidad. Habla con nosotros en un tono jovial de detalles concretos y de temas trascendentes.

Me agradece todo mi acompañamiento en estos meses, me dice cosas muy bonitas que no puedo retener. Yo le digo que lo nuestro fue un flechazo de amor a primera vista, que nunca me voy a olvidar de ella.

Entra parte de la familia cuando están canalizadas las dos vías venosas.

La habitación es blanca, su pijama blanco, el propofol también es blanco y por el ventanal entra la luz de la mañana tamizada por toldos blancos.

Comienza la sedación y ella no pierde la sonrisa. Sus nietas le dicen todo lo que la quieren y ella se despide deseando felicidad para todos nosotros.

Son las once y media y queda en el aire un espíritu de paz, de dignidad, de respeto a la vida y al proceso de morir que nunca había experimentado.